Son muy pocos los afortunados que pueden decir que encontraron el amor de su vida en este viaje, yo puedo decir que el destino me permitió encontrarlo, pero sólo para saber que existia.
Hay una gran y sutil diferencia entre amar y querer, para la mayoría la vida transcurre queriendo a la persona que nos acompaña, y no es que este mal, por el contrario se da una dedicación y búsqueda de la felicidad para ese acompañante.
Del otro lado de la linea, algunos pocos tenemos la satisfacción de poder amar a alguien, y es eso que abarca el querer más allá del otro, ahí es donde se involucran los sentimientos que laten en el interior, es sentir en el alma lo mismo que se busca dar, es una sonrisa en la propia, nacida de la que se dibujo en la ajena.
Hay muchas palabras para definir el amor, pero muy pocas realmente llevan el verdadero sentimiento que se quiere expresar, porque no es algo que se pueda explicar sin tener que hablar de uno mismo, por eso de que amar es amarse, tal vez.
Yo sé que te encontre, sé tambien que nunca podré poner en palabras todo lo que hay en mi interior, porque es este sentimiento único, el que me envuelve el corazón a la espera de un gesto, algo de ti que se convierta en esperanza, un guiño de la vida para poder terminarla feliz, juntos.
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